El mar es una amplia fuente de diversos recursos marinos que permitió a los antiguos habitantes de las diferentes sociedades preincas -y también a los incas- obtener bienes no sólo para el consumo, sino que les permitió generar redes de intercambio con otras zonas a las cuales estos recursos era de difícil acceso, contribuyendo así con la red de comercio o trueque en los Andes Centrales.
Debido a la gran importancia de los recursos marinos en el Antiguo Perú, encontramos diferentes diseños en manifestaciones culturales como cerámica, textiles, metales, arquitectura, entre otros.